jueves, 28 de enero de 2010

Los solitarios

Hay varias motivaciones para comer solo en un lugar público, a saber:

1. Querer hacerlo. Que a su vez se subdivide en:
1.1 Porque quieres estar solo
1.2 Porque estás apurado (trabajo, compromisos, etc.)

2. No tener con quien hacerlo, subdividido en:
2.1 Eres patético
2.2 Poco sociable
2.3 Nuevo en la ciudad

Intuyo que la gente trata de no hacerlo para no parecer que se cae en el patetismo, pero al fin de cuentas, ¿qué importa?.

No es difícil ver personas comiendo a solas en sitios públicos, y si se es observador, se puede constatar con facilidad, está claro que no es el común denominador, ya que no es secreto que somos animales gregarios, (también somos animales, gregarios!!).

Los que le temen a comer solos en sitios públicos o en general a pasar tiempo solos, no comprenden el placer de esta actividad, aunque la soledad debe practicarse en un sitio agradable para poder disfrutarla en plenitud, porque a los sitios malos o aburridos debe llevarse siempre un acompañante, es recomendable tener siempre a alguien con quien destrozar lo que nos molesta del entorno y el comportamiento absurdo y/o salvaje e irreflexivo de la gente: hay mucho material para reírse cuando hay mucha gente acumulada tratando de hacer todos al mismo tiempo las mismas actividades, de consumir los mismos productos, etc.

Por ejemplo una buena película se puede ver solo, pero una mala película jamás se debe ver en soledad (ojo, es imposible saber cuándo una película es mala antes de verla, pero esto aplica en caso de sospecha), por ejemplo: Avatar, si yo hubiese ido sola a verla no la hubiera disfrutado tanto, de hecho lo mejor de la película fue tener con quien destrozar ese bodrio, (claro, la compañía debe tener gustos similares, por tanto es recomendable no ir con alguien que haya disfrutado “Legalmente Rubia”).

Se me ocurre una hipótesis: la gente normalmente anda en manada porque a la mayoría no les gusta estar solos, si nunca estas solo no puedes tomarte el tiempo para reflexionar, si no puedes reflexionar no puedes desarrollar idea propias, si no tienes ideas propias adoptas las ideas de los demás sin pensar, ergo: eres tarado.

Entonces, dadas las circunstancias, llega el momento en el que pensar comienza a causar dolor físico y por ende, y como es lógico, dejas de pensar por completo ¿les parece descabellada esta idea?, ¿falta totalmente de sentido?, ¿quizás una completa habladera de gamelote?, fíjense en algo muy sencillo, en cómo se comporta una persona estando sola y como se comporta una persona (la misma del ejemplo anterior) estando en grupo, ¡¡¡AHHH!!!, ya lo vieron ¿cierto?, la gente cuando anda en grupo comienza a tener problemas cerebrales, comienzan a hablar en un tono más alto de lo que el tamaño del local requiere, comienzan a reír más de lo que el chiste amerita (sin alcohol de por medio), incluso comienzan a adoptar vicios absurdos que solos jamás habrían adquirido (fumar, apalear gente, tomarse fotos en poses absurdas, filmarse haciendo burradas para montarlas en youtube) etc.

Estas son la clase de personas que cuando están solas no saben qué hacer con el cerebro y entonces en un intento vano de mantenerse acompañados aunque sea de manera ilusoria, ven en TV cualquier programa menos VALE TV o Discovery o cualquier cosa que enseñe algo, porque correrían el riesgo de aprender algo y no quieren ni pueden dañar sus mentes vírgenes e impolutas.

Andar solos tiene ventajas infinitas, pero hacerlo es todo un arte, ya que hay que esquivar con cierta frecuencia el embate de extraños o conocidos en un intento de rescatarte de tu soledad, para ellos somos proscritos a los que hay que recuperar, salvarnos de nosotros mismos, porque eso de andar solos es de gente rara, ¡¡COMO SI ME IMPORTARA!!

En todo caso, la próxima vez que veas a alguien solo, piénsalo dos veces, quizás no necesita que lo rescaten y mucho menos un tarado como tú.

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